Fuente: Prensa CHA
Los despidos del subsecretario de la Juventud, Pedro Robledo, por afiliación política y la nueva contratación de militantes del PRO.
El subsecretario de la Juventud del Ministerio de Desarrollo, Pedro Robledo, despidió por cuestiones políticas -al vincularlos con el kirchnerismo- a unos 30 trabajadores que tenían contrato hasta diciembre y los reemplazó con militantes propios. Los motivos declarados por el subsecretario: “No quiero que la subsecretaría sea un local partidario de La Cámpora ni del PRO. Para ser respetuosos con los contribuyentes tomé la decisión más correcta. No queremos un 6 7 8 ni un 9 10 11″.
Pedro Robledo, según su propio testimonio, el sábado 23 de marzo de 2013 en una fiesta en el barrio de San Isidro como estaba de la mano con su pareja, unos alumnos del Colegio Marín a la voz de “el Papa es argentino, no pueden haber putos argentinos“, se acercaron a increparlo y lo insultaron: “Putos de mierda, váyanse de acá, es una casa católica”. Robledo les explicó que ellos también eran cristianos. En respuesta recibió un fuerte golpe de puño en el rostro. “Me gritaron en el oído, «puto de mierda, levantate»”, y luego, mientras estaba en el piso me seguían golpeando”. Quedó con la cara desfigurada.Ahora siendo subsecretario de la Juventud, deja sin trabajo a 30 empleados por tener vinculaciones con el kirchnerismo, lo que es una clara persecución política y una forma de discriminación.
César Cigliutti, presidente de la Comunidad Homosexual Argentina (CHA) dijo al respecto que “resulta una gran paradoja que un funcionario que alcanzó el punto más alto de su fama cuando fue recibido por la entonces presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, al ser discriminado por su orientación sexual, despida con el criterio discriminador a los/as trabajadores/as por su filiación política”. El “reemplazo” lo hizo con una “contratación directa” de 20 personas según criterios personales.
Despedir gente explicando que es por motivos de ideología partidaria es discriminatorio.
Puntualmente es discriminación por opiniones políticas, algo que esta expresamente prohibido en la Ley Antidiscriminatoria Nacional y tambien en la Ley Antidiscriminatoria de la CABA (sancionada hace pocos años).
Resulta también contradictorio que desde el estado se promuevan espacios de inclusión para la juventud, y paralelamente se despida del empleo en organismos del mismo estado a otros/as jovenes con justificaciones de exclusión por cuestiones políticas
“En la CHA trabajamos para enfrentar la discriminación por orientación sexual, identidad de género y sus expresiones y contra toda clase de discriminación. Que un funcionario que es públicamente gay (y que haya accedido a esa función por su identidad sexual), despida a empleados/as del estado a causa de su filiación política, es tan grave como la discriminación que sufre nuestra comunidad LGBTI, como la que también sufrió Pedro Robledo el 23 de marzo de 2013“, agregó Cigliutti.
