Un juez federal suspendió una ley de Arkansas que acusaría penalmente a los libreros y bibliotecarios que proporcionen “materiales nocivos” a los niños. La ley se dirige a los libros que incluyen personajes o temas LGBTQ+.
La ley, firmada por la gobernadora Sarah Huckabee Sanders (R), debía entrar en vigencia el 1 de agosto. Sanders, exsecretaria de prensa de la Casa Blanca durante la administración Trump e hija del expolítico de extrema derecha Mike Huckabee, tiene un historial de hacer afirmaciones inflamatorias anti-LGBTQ+ que no son ciertas.
La ley también requirió un nuevo proceso para que las personas impugnen los libros y soliciten que se trasladen a áreas a las que los niños no pueden acceder. La medida cautelar del juez pone fin a toda la ley.
Una coalición de varias bibliotecas públicas, la Asociación Estadounidense de Libreros, la Asociación de Editores Estadounidenses y el Sistema de Bibliotecas de Arkansas Central impugnaron la ley. Fueron representados por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU).
“La pregunta que teníamos que hacer era: ¿los habitantes de Arkansas todavía tienen acceso legal a materiales de lectura? Afortunadamente, el sistema judicial ha defendido una vez más nuestras libertades altamente valoradas”, dijo Holly Dickson, directora ejecutiva de la ACLU en Arkansas, en un comunicado.
Sanders y los legisladores estatales de Arkansas han estado persiguiendo activamente a la comunidad LGBTQ+. A principios de este año, el estado implementó una nueva ley que prohíbe a los estudiantes transgénero en las escuelas públicas usar baños que coincidan con su identidad de género. Un juez federal anuló una ley estatal que prohibía la atención médica de afirmación de género para menores a principios de este año.
Otra ley aprobada en Arkansas reclasificó los espectáculos de drag como “entretenimiento para adultos” y prohibió las actuaciones en propiedad pública o “donde un menor pueda verlas”. Leyes similares en Tennessee y Florida han sido anuladas o suspendidas.
