Los republicanos han demonizado repetidamente a las personas transgénero como parte de su última guerra cultural, en un intento por obtener votos y promover la agenda de la derecha religiosa. Sin embargo, últimamente los esfuerzos han resultado contraproducentes.
Otros miembros del Partido Republicano han comenzado a frustrar la legislación que discriminaría a la comunidad trans.
Un proyecto de ley de Utah, patrocinado por legisladores republicanos de ambas cámaras, habría prohibido la exhibición de banderas del Orgullo junto con cualquier discusión sobre orientación sexual o identidad de género.
Aunque los republicanos dominan la Cámara de Representantes del estado, el proyecto de ley fracasó en una votación de 39 a 32. Cuatro legisladores se abstuvieron.
A principios de este mes, el gobernador Spencer Cox (R) tomó la inusual medida de condenar y censurar a un miembro de la junta escolar estatal mediante una resolución aprobada por la legislatura dominada por los republicanos. La Junta de Educación también votó para despojar a la miembro de la junta de sus poderes oficiales y pidió su renuncia.
Mientras tanto, en Iowa, un cambio propuesto a la ley de derechos civiles del estado fue tan drástico y repugnante que incluso los republicanos se negaron a considerar la idea. El proyecto de ley habría despojado a las personas transgénero de la ley de derechos civiles del estado.
Una multitud de cientos de personas estalló en vítores cuando los miembros de un subcomité que habían escuchado una hora de testimonios contra el proyecto de ley anunciaron que no lo impulsarían más. El comité estaba compuesto por dos republicanos y un solo demócrata. Su voto fue unánime.
En el noreste, Moms for Liberty, un grupo notoriamente anti-LGBTQ+ que se abrió camino en la esfera política, colapsó espectacularmente después de que el marido de uno de los fundadores del grupo fuera acusado de violar a una mujer con la que mantenían una relación sexual en curso.
Los candidatos que el grupo respaldó fueron derrotados durante las elecciones del año pasado.
Y en Arizona, los republicanos quedaron colgados después de que un solo miembro rompió con el partido y votó con los demócratas en contra de una medida electoral antitransgénero propuesta.
