El director ejecutivo de GLAAD se enfrenta a una investigación por gastos excesivos

Gabriel Oviedo

El director ejecutivo de GLAAD se enfrenta a una investigación por gastos excesivos

Sarah Kate Ellis, presidenta y directora ejecutiva de GLAAD, está bajo escrutinio tras una investigación del New York Times sobre sus hábitos de gasto. El informe, encabezado por la periodista Emily Steel, afirma que los gastos de Ellis pueden ser más extravagantes de lo que es habitual para un líder de una organización sin fines de lucro.

Gastos extravagantes

Entre los hallazgos, se dice que Ellis gastó casi 500.000 dólares en alquilar un chalet de siete habitaciones en Suiza durante una semana para asistir al Foro Económico Mundial en Davos. Además, GLAAD se hizo cargo de una factura de 60.000 dólares para que Ellis y un colega asistieran a la cumbre publicitaria Cannes Lions en Francia. Otros gastos notables incluyeron 18.000 dólares en renovaciones en el hogar, incluida una nueva lámpara de araña, y más de 30 vuelos en primera clase. Todo esto se registró durante 18 meses.

Prácticas financieras cuestionables

La investigación planteó dudas sobre si estos gastos se ajustan a los estándares de las organizaciones sin fines de lucro y a las regulaciones del IRS. Michael West, un abogado especializado en organizaciones sin fines de lucro, comentó: “Parece que ella puede haber caído en la trampa del exceso”.

Los altos salarios bajo la lupa

El salario de Ellis, que puede oscilar entre 700.000 y 1,3 millones de dólares anuales, también ha sido objeto de críticas. Sin embargo, Ferraro aclaró: “En la práctica, es imposible que la Sra. Ellis reciba un millón de dólares en un año, y no ha recibido nada parecido en este contrato”. Este salario se atribuye al papel de Ellis en la revitalización de GLAAD, aumentando significativamente sus ingresos a 19 millones de dólares para 2022.

Acerca de GLAAD

GLAAD, la Alianza Gay y Lésbica Contra la Difamación, es una organización sin fines de lucro líder que trabaja para promover la aceptación de la comunidad LGBTQ y garantizar una representación justa en los medios. Fundada en 1985, GLAAD está comprometida a cambiar la narrativa sobre las personas LGBTQ y sus problemas a través de la defensa, la educación y campañas de impacto. La organización desempeña un papel crucial a la hora de exigir responsabilidades a los medios de comunicación y amplificar las voces de la comunidad LGBTQ.

Respondiendo a los costos

Rich Ferraro, portavoz de GLAAD, defendió los gastos de Ellis. Explicó que muchos de estos costos eran esenciales para la misión de GLAAD, como fomentar las relaciones con los donantes y asistir a eventos importantes. Ferraro enfatizó que una donación de la Fundación Ariadne Getty, un partidario de GLAAD desde hace mucho tiempo, financió el viaje a Davos.

La propia Ellis abordó la controversia y afirmó: “Tomo mi papel como administradora financiera de GLAAD muy en serio y seguiremos actualizando nuestros procedimientos para mantener el ritmo del rápido crecimiento de la organización. Nuestro trabajo nunca ha sido más urgente porque la comunidad LGBTQ está siendo objeto de cada vez más ataques”.

ALEGRE Apoyo de la Junta Directiva

A pesar de la controversia, la junta directiva de GLAAD apoya firmemente a Ellis. Liz Jenkins, la presidenta de la junta, expresó su apoyo inquebrantable y afirmó: “La junta directiva y yo apoyamos firmemente a Sarah Kate Ellis, con respeto y aprecio por la forma en que ella y su equipo lideran el movimiento en un momento en que nuestra comunidad está bajo ataque. Tenemos plena confianza en que lo están haciendo con integridad y que comparten el compromiso de la junta directiva con una gobernanza y prácticas comerciales irrefutablemente sólidas”.

La junta había encargado previamente al bufete de abogados Sheppard Mullin que investigara las preocupaciones sobre gastos, lo que dio como resultado recomendaciones para actualizar las políticas de viajes. Después de la investigación, la directora financiera de GLAAD, Emily Plauché, quien inicialmente señaló las preocupaciones, abandonó la organización.

Esta historia continúa.