Recientemente, las fuerzas de defensa y de inteligencia del gobierno israelí han degradado gravemente a las fuerzas de Hezbolá en el Líbano al colocar explosivos en sus buscapersonas y sistemas de walkie-talkie. Aunque las estimaciones de víctimas no son concluyentes, el ataque coordinado mató a docenas de personas y dejó a miles más con heridas graves. Entre las víctimas se han incluido niños.
Mientras algunos felicitan a Israel por sus impresionantes y sin precedentes operaciones militares, yo adopto una posición muy diferente, porque temo que lo que hemos presenciado durante el último año tenga consecuencias mucho mayores y aún más letales.
El gobierno derechista israelí, encabezado por el Primer Ministro Benjamin Netanyahu, ha actuado con base en suposiciones falsas en su lucha contra Hamás durante el año pasado. Aunque me resulta difícil ser breve, intentaré hacerlo enumerando los siguientes puntos:
1. Israel debe dejar atrás su quimera de diezmar totalmente a Hamás. Aún no ha logrado su objetivo, lo que es prácticamente imposible porque muchos combatientes y dirigentes de Hamás se han trasladado al extranjero. Al camuflarse entre civiles palestinos, cada vez se sumarán más inocentes a las aproximadamente 40.000 víctimas mortales desde el 6 de octubre de 2023.
2. Israel debe dejar atrás su quimera de diezmar totalmente a Hezbolá, que es incluso más fuerte que Hamás en términos de financiación iraní, número de combatientes y un arsenal de armamentos sustancialmente más amplio.
3. Si Israel hubiera acordado previamente un alto el fuego con Hamás, Hezbolá probablemente habría limitado o detenido sus ataques con misiles al norte de Israel y sus posibles operaciones para invadir Israel.
4. Al abrir un frente importante en el Líbano, Israel se arriesga a una guerra mucho más amplia en Oriente Medio, con cada vez más matanzas en ambos bandos, lo que podría obligar a Irán a entrar de nuevo en la contienda de forma directa y más profunda.
5. Israel está olvidando las lecciones de la Segunda Guerra Mundial, cuando los nazis sellaron su propia caída al abrir otro frente de guerra en el Este al invadir la Unión Soviética.
6. Israel está sellando su caída al abrir su frente norte hacia el Líbano, desviando sus limitados recursos a otro teatro de guerra y prácticamente matando los Acuerdos de Abraham que podrían haber logrado que los estados árabes negociaran un acuerdo de paz equitativo.
7. Los países occidentales, incluidos los Estados Unidos, deben dejar de enviar ayuda militar a Israel y deben ejercer más presión sobre el gobierno para que negocie de buena fe. Al seguir enviando armamentos a Israel, estas naciones aliadas están permitiendo y conspirando para que se produzcan lesiones y asesinatos de muchas personas inocentes atrapadas en estas hostilidades incesantes.
En definitiva, parece claro que, como las Fuerzas de Defensa de Israel están reduciendo sus bombardeos sobre Gaza y como Netanyahu no quiere que las hostilidades terminen, ha creado un nuevo frente para mantener la guerra. El día en que las hostilidades lleguen a su fin, Netanyahu y su gobierno caerán y serán reemplazados, posiblemente, por una coalición más centrista.
Cuando finalmente deje el poder, Netanyahu corre el riesgo de ir a prisión por cargos previos de fraude y corrupción.
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