El jefe de gabinete de la Casa Blanca, Stephen Miller, se quedó helado después de afirmar que el presidente estadounidense Donald Trump tiene “autoridad plenaria” en una extraña entrevista.
El funcionario republicano de 40 años dejó de hablar durante una entrevista con CNN el lunes (6 de octubre) inmediatamente después de decir que el presidente tiene autoridad plena –o poder absoluto– sobre el tema.
Al discutir el intento de Trump de desplegar la Guardia Nacional en Oregón, el presentador de CNN Boris Sánchez le pidió al asistente de Trump que aclarara si la administración planea seguir la orden de un juez federal estadounidense que le impide desplegar tropas en el estado.
CNN: ¿La administración todavía planea cumplir con ese fallo judicial?
STEPHEN MILLER: La administración presentó una apelación esta mañana……
CNN: ¿Esteban? ¿Esteban? ¿Puedes oírme?
MILLER: … … … pic.twitter.com/9JihkIV1nQ
— Aarón Rupar (@atrupar) 6 de octubre de 2025
“Bueno, la administración presentó una apelación esta mañana ante el Noveno Circuito”, dijo. “Quiero señalar que la administración ganó un caso idéntico en el Noveno Circuito hace apenas unos meses con respecto a la federalización de la Guardia Nacional de California.
“Según el Título 10 del Código de Estados Unidos, el presidente tiene autoridad plena…” dijo Miller antes de detenerse por completo.
“¿Stephen? ¿Stephen? Hola Stephen, ¿puedes oírme?” Sánchez preguntó mientras Miller no respondía.
Luego, Sánchez terminó la entrevista y se disculpó con los espectadores, alegando que “parece haber algunos problemas técnicos”.
¿Qué es la autoridad plenaria y la tiene Trump?
El término autoridad plena, a veces conocido como poder plenario, es un poder completo y absoluto que tiene un individuo o funcionario para tomar medidas sobre un tema en particular. La palabra plenaria deriva del término latino plenus, como en ‘pleno’.
Básicamente, significaría que Trump tendría un poder absoluto y amplio para tomar decisiones sin supervisión.
El Título 10 del Código de los Estados Unidos describe el papel general de las fuerzas armadas estadounidenses. Una disposición en el Título permite al presidente de Estados Unidos llamar a la Guardia Nacional al servicio si Estados Unidos es invadido o si existe “una rebelión o peligro de rebelión”.
Sin embargo, este no es un poder absoluto. La capacidad del presidente para desplegar la Guardia Nacional sólo puede invocarse si se cumplen ciertas condiciones y está sujeta al escrutinio del Congreso y los tribunales federales.
Como tal, la disposición no le otorga a Trump poder absoluto para desplegar tropas estadounidenses donde quiera y no le otorga autoridad plena.
La afirmación, más bien, parece ser parte de un esfuerzo continuo por parte de la administración para darle a Trump niveles crecientes –y preocupantes– de poder.
En agosto, mientras hablaba de sus derechos para desplegar la Guardia Nacional en Chicago, Trump dijo: “Tengo derecho a hacer lo que quiera. Soy el presidente de los Estados Unidos”.
Al abordar las afirmaciones de que está intentando instaurar una dictadura, Trump dijo: “Trump es un dictador, dice la mayoría de la gente, si detiene el crimen, puede ser lo que quiera”.



