(SentidoG)

Elena Lorenzo habla de la “cultura AMS” (atracción hacia personas del mismo sexo) como si se tratase de un síndrome, una enfermedad o un trastorno psicológico. Para separarse de las llamadas “terapias de reconversión o reorientación sexual”, la coach asegura que el hecho de cambiar la orientación sexual es una decisión. “Cambiar o no cambiar es una decisión libre. Si la persona lo desea, puede intentar dejar atrás la homosexualidad. Nunca he hablado de cura, sino que ofrezco ayuda para lograrlo. Hablo de ‘dejar atrás'”.

La coach española Elena Lorenzo ya ha estado bajo fuego en el pasado por sus particulares servicios para “dejar atrás la homosexualidad”. En el año 2016 fue denunciada por Acrópoli, una asociación para la defensa de los derechos y libertades LGTB de Madrid, ante lo cual ella se defendió aduciendo a “las falsas acusaciones del lobby gay y al intento de censurar mi web”. No contenta con los servicios que ofrece a través de su portal y del apoyo que recibe de organizaciones religiosas y de defensa de los derechos de la familia, Elena se dedica ahora a “reclutar pacientes” a través de las apps de contactos gays como Grindr.

“En ningún momento me presento como psicóloga. Soy coach profesional certificada por la escuela española Lider-Haz-Go. En ningún momento empleo técnicas que susciten rechazo o repugnancia a su orientación sexual“, explicó Elena. En la portada de su web, humildemente llamada “LoSé”, puede leerse lo siguiente: “Creo en el derecho de autodeterminación de la persona. Respeto el camino personal y espiritual de todos y de cada uno. Si alguien experimenta conflictos con respecto a su sexualidad basada en creencias espirituales o de otra índole, esto deberá ser honrado y respetado por la Ley Internacional de Derechos Humanos. Como coach, profesionalmente apoyaré siempre las metas que se propongan mis clientes”.

A pesar de ese “respeto” del que ella habla, llegaron a nuestra redacción capturas de pantalla de una cuenta de Grindr mediante la cual Elena ofrece sus servicios a los usuarios de la app. “¡Hola! Soy Elena, diplomada en psicoterapia y coach, experta en ayudar a personas con AMS (atracción al mismo sexo) y a ayudarlas a salir de la homosexualidad. Tengo consulta en Altea y Alicante” es la descripción que aparece en su perfil. Y con el siguiente mensaje contacta a los hombres gays que frecuentan la aplicación: “Hola, ¿te gustaría salir de la homosexualidad? Dejar atrás el sexo esporádico y la mediocridad, descubrir el origen de tus sentimientos y aflorar la heterosexualidad. Nos vemos en: elenalorenzo.com”.

No contenta con eso, ante la negativa, rechazo o confrontación de parte su interlocutor, Elena responde con frases como “Prefieres llevar una vida de sexo esporádico a reconocer la verdad“, “¿Qué haces aquí? ¿Buscar marido para casarte? No me hagas reír”, “Además no has visitado mi página web, por lo tanto NO PUEDES OPINAR”. Existe la posibilidad de que se trate de una cuenta falsa, de todos modos quien sea que maneje ese usuario está realizando una intrusión en un espacio dedicado a los contactos entre hombres gays y/o bisexuales que no tiene por qué tolerar juicio y disriminación en un ambito que les pertenece.

En un apartado en su sitio web, Lorenzo ha publicado su “respuesta a las falsas acusaciones del lobby gay y al intento de censurar mi web” en donde comparte que “la organización Arcópoli pide que las autoridades de la Comunidad de Madrid, gobernada por Cristina Cifuentes (PP), apliquen ya la reciente ‘Ley contra la LGTBIfobia’, en vigor desde el 11 de agosto de 2016 con el apoyo de todos los partidos, para censurar esta web”. A continuación comparte la entrevista realizada por Religión en Libertad y desde su superioridad moral y ‘profesional’ espera que todos los medios de comunicación publiquen “la veracidad” de sus palabras.

Acerca de la denuncia de Acrópoli, Lorenzo explicó que “no entienden lo que leen. Ofrezco – y lo escribo claramente – que si la persona lo desea, puede intentar dejar atrás la homosexualidad. Es igual que decir que, si una persona que descubre su orientación homosexual y “sale del armario”, está dejando atrás la heterosexualidad en la que vivía”.

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