Kat Kerr, que se describe a sí misma como “profetisa” cristiana, ha ideado una extraña teoría sobre por qué algunas personas son homosexuales: Dios les dio a algunas personas “asignaciones muy especiales”, pero el diablo interfirió haciéndoles amar a miembros del mismo sexo.
“Si dejas que personas contaminadas vengan y participen de cosas santas en esas iglesias porque se han contaminado, estoy hablando de homosexuales”, dijo en un vídeo compartido por el escritor Hemant Mehta.
“Todos fueron elegidos por Dios para tareas muy especiales”, explicó Kerr. “¡Así que a Satanás se le ocurrió una manera de robarles el destino y evitar que alguna vez se convirtieran en una amenaza para él! ¡Por eso los eligió!
“¡Pero tengo noticias para ellos! Si estás escuchando, se avecina un avivamiento en el que millones de homosexuales correrán al reino de Dios, y si cambias las partes de tu cuerpo, ¡él te las volverá a poner! gritó entre aplausos.
Kerr es el autor del libro. Revelando el cielopresentadora de podcasts y presidenta de One Quest International, que, según ella, es un grupo dedicado a “revelar el cielo a la tierra”.
En su libro, afirmó que Dios “levantó el velo entre el Cielo y la Tierra” y la llevó a recorrer el cielo e incluso vio “The Rush, la montaña rusa más grande del cielo”, así como las guarderías celestiales para fetos abortados y abortados.
En diciembre de 2020, un mes después de que el presidente Joe Biden ganara sus elecciones pero un mes antes de su toma de posesión, Kerr dijo que escuchó a Dios reír y supo que eso significaba que Biden no sería nombrado presidente.
“Cuando me desperté ayer, él se estaba riendo”, dijo Kerr. “Quiero decir, lo escuché reír a carcajadas”.
Dijo que Dios le dijo: “Me estoy riendo por lo que han dicho que llegó a ser la votación electoral”.
“Nada de eso importa, nada de eso importa”, supuestamente le dijo Dios a Kerr. “No va a cambiar mi plan. No me importa quién llame presidente a Biden. Nunca será presidente. No permitiré que la oscuridad se asiente en este país ni lo controle”.
“Estados Unidos es mi regalo, que invoqué para que sea una bendición para este mundo. Y tendré rectitud, justicia, libertad y libertad para todos en ese país”, añadió, citando directamente a Dios, según ella.
Dijo que “otros” que no quieren que Trump sea presidente “no tendrán un gran futuro, tal vez ni siquiera un futuro”.