El propietario de un restaurante de Ohio que atrajo la atención por prohibir las transmisiones olímpicas en sus cuatro restaurantes de Ohio después de llamarlos anticristianos, ahora enfrenta cargos de violación, secuestro e intento de asesinato.
Bobby George, de 43 años, fue noticia hace dos semanas cuando anunció que su grupo de restaurantes estaba “protestando” contra los Juegos Olímpicos de París por lo que describió como una “representación sacrílega de ‘La Última Cena’” en la ceremonia de apertura del evento. La famosa pintura de 1498 del artista gay Leonardo Da Vinci representaba la última cena que Jesús compartió con sus apóstoles antes de su crucifixión, según los relatos del Evangelio.
“(La representación) fue manejada con un nivel irresponsable de irreverencia, insultando la fe cristiana”, publicó George en un anuncio en Instagram y en carteles en sus restaurantes. Los derechistas se quejaron por la inclusión de drag queens en la representación, sin embargo, los funcionarios olímpicos dijeron que estaba inspirada en el Festival griego de Dionisio, no en “La Última Cena”.
Más recientemente, informes policiales obtenidos por Cleveland.com dijeron que George agredió a su víctima, una mujer de 25 años que vivió con él durante el año pasado, varias veces, la amenazó con un arma y la golpeó tan severamente que tuvo que ser tratada por una enfermera practicante que trabajaba con el propio grupo de restaurantes de George.
“¿Crees que Dios te va a ayudar?”, supuestamente George se burló de la mujer mientras le metía una toalla por la garganta y la estrangulaba, según la policía. George también se burló de ella por rezarle a Dios, diciendo que no moriría durante uno de sus múltiples ataques, añadieron los informes.
El abuso comenzó en septiembre de 2023 y terminó el mes pasado, dijo la policía.
El dueño del restaurante se entregó el viernes después de que se emitiera una orden de arresto en su contra por cargos de intento de asesinato, violación, agresión grave, cuatro cargos de secuestro y dos cargos de estrangulamiento.
George fue puesto en libertad el martes tras pagar una fianza de 200.000 dólares tras comparecer ante el Tribunal Municipal de Cleveland. En una orden de protección, el juez le prohibió a George ponerse en contacto con su presunta víctima.
La mujer “teme por su vida”, según documentos judiciales.
En el primer ataque detallado por la policía, George supuestamente arrojó a su víctima contra un armario de cocina con tanta fuerza que el vidrio se rompió.
Al mes siguiente, George la inmovilizó contra el suelo, la estranguló y le golpeó la cabeza contra una mesa repetidamente. La policía afirma que después sufrió visión borrosa, sangrado y zumbidos en los oídos.
“El acusado luego hizo que la víctima fuera tratada por la enfermera de su empresa, quien le diagnosticó síndrome post-conmoción cerebral”, según un informe de la Unidad de Violencia Doméstica de la policía de Cleveland contenido en la orden de arresto.
Se acusa a George de meterle un arma en el estómago a la mujer después de que ella intentó huir de su casa, de violarla después de que saliera de la ducha y de estrangularla en múltiples ocasiones.
“El acusado le tiró del pelo, la estranguló y la arrojó por toda la casa”, escribió un detective de la policía de Cleveland.
El abogado de George, Kevin Spellacy, negó las acusaciones.
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