Un juez federal de Kentucky dictaminó que las regulaciones del Título IX de la administración Biden, que ampliaban las protecciones para los estudiantes LGBTQ+, eran inconstitucionales, derogándolas en todo el país. La decisión, emitida el jueves por el juez de distrito estadounidense Danny C. Reeves, invalidó todo el reglamento de 1.500 páginas, citando lo que describió como un razonamiento legal “fatalmente defectuoso”.
El fallo es un duro golpe al esfuerzo de la administración por proteger a los estudiantes LGBTQ+ de la discriminación en la educación. La regulación ya había enfrentado desafíos en 26 estados, y los estados liderados por republicanos presentaron demandas por la política. La norma del Título IX, que tenía como objetivo ampliar la protección contra la discriminación por motivos de identidad de género y orientación sexual, fue fuertemente cuestionada desde el principio.
El fallo del juez Reeves se produjo en respuesta a una demanda presentada por varios estados, incluidos Tennessee, Kentucky, Indiana, Ohio, Virginia y Virginia Occidental. Estos estados argumentaron que la administración se había excedido en su autoridad al ampliar el alcance del Título IX, una ley histórica de 1972 que prohíbe la discriminación basada en el sexo en la educación.
El fiscal general de Tennessee, Jonathan Skrmetti, elogió la decisión y la calificó de reprimenda al “implacable impulso de la administración Biden para imponer una ideología de género radical”. Skrmetti añadió que el fallo permitiría al presidente Donald Trump, que está a punto de regresar a su cargo, “dar una nueva mirada a nuestras regulaciones del Título IX”.
“No hay nada en el Título IX que sugiera que deba cubrir algo más que lo que ha cubierto desde que el Congreso lo creó”, escribió Reeves en su decisión. “Este es un intento de eludir el proceso legislativo y transformar completamente el Título IX”, añadió el juez.
Las regulaciones fueron finalizadas en 2022 por el Departamento de Educación bajo la presidencia de Joe Biden. Ampliaron el alcance del Título IX para incluir protecciones para los estudiantes LGBTQ+, prohibiendo explícitamente la discriminación basada en la identidad de género u orientación sexual. Además, las nuevas reglas ampliaron la definición de acoso para incluir una gama más amplia de malas conductas.
Si bien los grupos de derechos civiles elogiaron los cambios como una victoria para los estudiantes LGBTQ+, los críticos, principalmente de círculos conservadores, los vieron como una amenaza para los deportes femeninos y una extralimitación del poder ejecutivo. Los críticos, incluidas algunas figuras prominentes de la administración Trump, argumentaron que las reglas podrían permitir que las mujeres transgénero compitan en deportes femeninos, lo que, según afirmaron, socavaría la equidad.
El fallo del juez Reeves invalida efectivamente la interpretación ampliada del Título IX, volviendo a la interpretación anterior, más estricta, que existía antes de la nueva regulación. Reeves dijo que su decisión “simplemente provocaría un regreso al status quo” que había existido durante más de cinco décadas.
Una de las opositoras más acérrimas de las nuevas regulaciones fue Betsy DeVos, exsecretaria de Educación durante la presidencia de Trump. DeVos recurrió a las redes sociales después del fallo y calificó los cambios de la administración Biden al Título IX como “radicales, injustos, ilegales y absurdos”. Ella expresó su satisfacción con la decisión y afirmó: “La reescritura SE HA IDO”.
El senador Bill Cassidy, republicano por Luisiana, que preside el Comité Senatorial de Salud, Educación, Trabajo y Pensiones, también condenó la regulación. Sostuvo que la norma del Título IX de Biden había “traicionado la intención original” de la ley y eliminado importantes protecciones para las mujeres y las niñas.
“El objetivo es garantizar la justicia, las oportunidades y el éxito para las mujeres y las niñas en las aulas y en el campo”, dijo Cassidy en un comunicado, afirmando que un futuro gobierno liderado por los republicanos trabajaría para salvaguardar estas oportunidades para las mujeres y las niñas.
La administración Biden, que esperaba garantizar una mayor protección para los estudiantes LGBTQ+, aún no ha emitido un comentario oficial sobre el fallo. Sin embargo, los defensores de los derechos LGBTQ+ han expresado preocupación por el impacto de la decisión, y muchos temen que pueda llevar a una reducción de las protecciones para los estudiantes vulnerables.
La medida de la administración Biden de ampliar las protecciones del Título IX se consideró parte de un impulso más amplio para garantizar los derechos civiles de las personas LGBTQ+. Además de las protecciones en la educación, la administración había tratado de prevenir la discriminación en áreas como la atención médica, la vivienda y el empleo. Sin embargo, el fallo del juez Reeves representa un revés para esos esfuerzos, y se espera que continúen más desafíos legales.
Este fallo se produce mientras el debate sobre los derechos LGBTQ+ en la educación sigue siendo polémico en todo Estados Unidos, con varios estados aprobando leyes que restringen los derechos de los estudiantes transgénero, particularmente en los deportes. El futuro del Título IX y su interpretación probablemente será una cuestión clave en los próximos ciclos electorales, mientras ambos lados del debate se preparan para nuevas batallas legales y políticas.
Como se espera que la decisión sea apelada, no está claro cuál será la resolución final. El fallo puede ser revisado por tribunales superiores, incluido el Tribunal de Apelaciones de EE. UU. y, potencialmente, la Corte Suprema de EE. UU.