Donald Trump with his head tilted.

Esteban Rico

Los grupos LGBTQ+ demandan a la administración Trump sobre órdenes ejecutivas: “No seremos silenciados”

Los grupos LGBTQ+ han presentado una demanda contra la administración Trump sobre las órdenes ejecutivas implementadas para desmantelar las iniciativas de diversidad, equidad e inclusión (DEI).

Varias organizaciones de derechos LGBTQ+, incluida la Fundación de SIDA de San Francisco y la Sociedad Histórica GLBT, que encabezan la demanda, alegan que un trío de órdenes ejecutivas firmadas por Trump niega la existencia de personas trans y, por lo tanto, viola sus derechos.

El jueves (20 de febrero), la demanda fue presentada en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Norte de California por grupos de derechos civiles El Fondo de Defensa Legal y Lambda Legal. Es uno de los muchos presentados contra la nueva administración.

Las órdenes que desafían son: “Defender a las mujeres del extremismo de la ideología de género y restaurar la verdad biológica al gobierno federal”, “poner fin a los programas de DEI del gobierno radical y derrochador y preferencias” y “poner fin a la discriminación ilegal y restaurar la oportunidad basada en el mérito”.

En la queja, todos los grupos, que reciben fondos federales para apoyar su trabajo, afirman que las órdenes ejecutivas son una violación de sus derechos de la Quinta Enmienda bajo la Constitución de los Estados Unidos de que “(n) o la persona … será privado de la vida, la libertad, o propiedad, sin el debido proceso legal “.

‘No seremos silenciados’

Tyler Termeer, uno de los demandantes y CEO de la Fundación de SIDA de San Francisco, dijo a ABC News: “El gobierno intenta borrar a un grupo muy específico de personas. Las personas transgénero y no binarias en nuestro país están siendo señaladas como individuos a las que se les dice que no existen.

“Así que este momento vamos a los tribunales y dicemos: ‘No seremos silenciados'”.

El abogado José Abrigo, del Fondo de Defensa Legal y Educación de Lambda, dijo: “Las órdenes son vagas, usan términos indefinidos y hacen que el cumplimiento sea imposible y la ejecución arbitraria.

“Nuestros demandantes no tienen forma de saber qué programas, políticas o incluso palabras pueden resultar en sanciones”.