Una pareja en Indonesia ha sido sentenciada a la flagelación pública por participar en el sexo gay, destacando la criminalización continua del país de la actividad del mismo sexo en ciertas regiones. Los dos individuos, de 24 y 18 años, fueron condenados bajo la estricta ley de la sharia que gobierna la provincia de Aceh, donde la homosexualidad está prohibida y punible con duras sanciones.
La sentencia, que incluye 85 y 80 pestañas para las personas respectivas, sigue su arresto en noviembre de 2023. La pareja fue detenida en Banda Aceh, después de que los vecinos supuestamente irrumpieron en su habitación alquilada y los descubrieron desnudos y abrazados. El Human Dignity Trust, una organización que aboga por los derechos de los individuos LGBTQ+, ha señalado que la actividad del mismo sexo está criminalizada en Aceh y Sumatra del Sur, donde los castigos pueden incluir hasta ocho años de prisión y 100 pestañas.
Contexto legal en Aceh
Aceh, una provincia sobre el extremo occidental de Indonesia, ha aplicado durante mucho tiempo interpretaciones estrictas de la ley Sharia, particularmente desde el acuerdo de autonomía de la provincia en 2001. En 2014, la región aprobó una ley específicamente que criminaliza la homosexualidad, con estas leyes en vigencia en 2015. Durante la última década, Aceh se ha vuelto cada vez más conservador, con castigos más duros por las relaciones entre personas del mismo sexo y otros comportamientos considerados contrarios Enseñanzas islámicas.
El fallo reciente sobre el caso de la pareja sigue a un incidente similar en 2021, cuando dos hombres homosexuales fueron azotados públicamente después de que una mafia vigilante asaltó su departamento, supuestamente los atrapó en el acto y los entregó a las autoridades. Los dos hombres fueron sentenciados a 77 pestañas.
La flagelación pública en Aceh ha provocado indignación internacional, particularmente de las organizaciones de derechos humanos, que argumentan que tales castigos son inhumanos y violan los estándares internacionales de los derechos humanos. En 2022, Indonesia también llegó a los titulares cuando dos soldados fueron despedidos del ejército y encarcelados durante siete meses después de ser declarados culpables de tener sexo gay, lo cual está prohibido por el ejército del país.
Corredor de la corte y sentencia
En este caso más reciente, el juez, identificado como Sakwanah, dictaminó que los dos jóvenes habían cometido actos ilícitos, lo que, bajo la interpretación de Aceh de la ley de la sharia, incluía besarse y participar en relaciones sexuales. El juez enfatizó que, como musulmanes, los acusados debían defender la ley que prevalece en Aceh, que prohíbe la homosexualidad.
A pesar de la gravedad de la sentencia, ambos acusados decidieron no apelar el fallo. Esta decisión refleja el miedo y la presión que enfrentan las personas en circunstancias similares, que pueden sentir que desafiar la sentencia podría resultar en un mayor castigo o represalias.
Reacciones globales y creciente sentimiento LGBTQ+
El director de Amnistía Internacional de Indonesia, Usman Hamid, criticó el creciente sentimiento anti-LGBTQ+ en el país, que atribuyó en parte a las “declaraciones inflamatorias” hechas por los líderes políticos. Estos comentarios, argumenta Hamid, han contribuido a un clima donde las personas LGBTQ+ enfrentan una persecución y vilipendancia pública.
El sistema legal de Indonesia, en particular, ha sido criticado por su tratamiento de personas LGBTQ+. En 2020, las autoridades allanaron un hotel en Yakarta durante una fiesta gay, arrestando a nueve hombres. Los organizadores del evento fueron acusados bajo las leyes de anti-pornografía, que conllevan sanciones severas, incluidas hasta 15 años de prisión y multas sustanciales. La represión generó preocupaciones sobre la postura del país sobre los derechos LGBTQ+, con muchas organizaciones de derechos humanos etiquetando acciones como discriminatorias.
Además de los desafíos legales, el código penal de Indonesia también ha enfrentado fuertes críticas de varios grupos de derechos humanos. En 2019, el Centro de Derecho Indonesio, Islam y Sociedad en Melbourne condenó el código como un “desastre de derechos humanos” para las personas LGBTQ+, destacando sus disposiciones amplias y punitivas contra las relaciones entre personas del mismo sexo.
La lucha por los derechos LGBTQ+ en Indonesia
Si bien los derechos LGBTQ+ han hecho avances significativos en muchas partes del mundo, Indonesia sigue siendo uno de los países donde las relaciones entre personas del mismo sexo se criminalizan en ciertas regiones. Las leyes de Aceh se encuentran entre las más duras del país, y los castigos públicos como la flagelación continúan siendo una realidad para muchas personas LGBTQ+. La comunidad global continúa pidiendo la despenalización de la homosexualidad y la protección de los derechos LGBTQ+ en Indonesia.
A pesar de los contratiempos, los activistas locales de LGBTQ+ siguen siendo resistentes en su lucha por la igualdad de derechos y las protecciones legales. Muchos continúan abogando por la derogación de leyes que criminalizan la homosexualidad y promueven la aceptación de la diversidad sexual en la sociedad indonesia. Sin embargo, el camino hacia el cambio parece desafiante, dadas las actitudes religiosas y culturales arraigadas que continúan dando forma a la política pública en Aceh y otras partes del país.
Como los derechos LGBTQ+ siguen siendo un tema controvertido y sensible en Indonesia, la comunidad internacional, incluidas las organizaciones de derechos humanos, continúa monitoreando de cerca los desarrollos, pidiendo una mayor protección de las personas LGBTQ+ de la discriminación, la violencia y la persecución legal.