Buenos Aires – (www.SentidoG.com)

Los robots más queer del cine y la TV

Robots, computadoras y otros extraños aparatejos animados supieron ganarse nuestro corazón de niños y adolescentes, en las producciones de ciencia ficción que el cine y la televisión nos regalaron durante los años setenta y ochenta. No obstante, vistos hoy en día, podríamos sorprendernos cómo, más allá de la forma que les tocara en suerte a estas adorables mascotas de hojalata, todas ellas coincidían en cierto estilo “queer” con el que los productores de antaño asimilaban el futuro y con el que nosotros seguramente hacíamos contacto. A continuación, les proponemos un ranking con los dispositivos más “queer” de aquellos viejos sueños futuristas.

HAL 9000, “2001” (1968)
Una voz masculina, aplomada y bastante aburrida dio vida a la computadora HAL 9000 en el film “2001”. Supuestamente, la misión de HAL era hacerle más fácil la vida al capitán Dave Bowman, durante una misión a Saturno. Pero, a medida que avanza la historia, descubrimos una relación de amor, odio y traición, digna del más retorcido de los culebrones.

KITT, “El auto fantástico” (1982)
Leal compañero de un joven David Hasselhoff (mucho antes del eterno bronceado que exhibía en “Baywatch”), la computadora KITT también se destacaba por su sensibilidad. De hecho, y a pesar de su voz masculina, el susceptible dispositivo le hizo unas cuantas escenitas al conductor, durante los años que duró la entrañable serie.

Twiki, “Buck Rogers en el siglo 25” (1979–81)
Desde su silueta de niña tirolesa hasta su “dubidubidubi” con el que comenzaba cualquier sentencia, Twiki da con el tipo de gay ingenuo, recién llegado del campo a la ciudad, que supo convertirse en estrella de una de las series futuristas más gays que podamos citar.

Johnny 5, “Corto circuito” (1986)
Detrás de esa voz insoportable, asomaba uno de los robots más tiernos del cine, amante de las mariposas y otras mariconadas por el estilo. Este antiguo modelo de Wall-E, aunque con menos conciencia ecológica, supo ganarse el corazón del público de los ochenta con sus alegres aventuras.

C3PO, “Star Wars” (1977)
Especialista en protocolo intergaláctico, C3PO es definitivamente el dispositivo futurista más gay de la historia del cine. Temeroso, delicado y enfundado en un traje dorado y brillante, sin duda merece encabezar este ranking.

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