Soy una celebridad… Sácame de aquí Las cifras de audiencia han caído en picada, luego de los llamados a boicotear el programa por haber elegido al político de extrema derecha y presentador de GB News, Nigel Farage.
La popular serie de telerrealidad de ITV regresó el domingo (19 de noviembre) con una gran reacción después de anunciar que el ex líder del UKIP y activista por el Brexit entraría en la jungla. Muchos criticaron al canal por ofrecerle a Farage una plataforma considerando su historial de retórica ofensiva, a menudo dirigida a comunidades minoritarias.
En el período previo al primer episodio, los fanáticos pidieron un boicot coordinado de la nueva temporada, en la que también participan celebridades como Jamie Lynn Spears y Nella Rose.
El boicot aparentemente tuvo un impacto desde el comienzo de la serie, ya que las cifras iniciales de audiencia del primer episodio de la serie, con un promedio de 6,95 millones, mostraron una caída de más de dos millones en comparación con los 9,1 millones de espectadores promedio del año pasado.
Las últimas cifras indican que el boicot continúa afectando las cifras de audiencia. La noche del sábado (25 de noviembre) experimentó otra caída, con una audiencia máxima que alcanzó sólo 5,5 millones de espectadores. La audiencia media se situó en 4,8 millones.
La noticia llegó junto con una encuesta de YouGov que mostró que el 57 por ciento de los británicos tenía una opinión desfavorable del populista del Brexit. Muchos fanáticos han acusado a ITV de ayudar a limpiar la imagen pública de Farage de manera similar a la serie de 2022, cuando el exsecretario de salud Matt Hancock estaba entre el elenco.
La ira se ha intensificado aún más tras los rumores de que a Farage le pagaron una supuesta £1,5 millones para aparecer en el reality show, con sede en Australia.
Los fanáticos han estado recurriendo a X/Twitter durante la semana pasada para mantener el impulso del boicot.
“Todos mirando soy una celebridad Quien no quiera que un demagogo de derechas gobierne el país dentro de unos años debe parar. Si estás mirando, eres cómplice de la desinfección de Farage”, escribió una persona.
“Nigel Farage no es entretenimiento, y Soy una celebridad no debería ser un ejercicio de relaciones públicas para aspirantes a políticos fascistas”, repitió otro.
El diputado del SNP, Owen Thompson, expresó su “profunda preocupación y total decepción” por la plataforma de Farage a The Daily Record el martes (28 de noviembre).
“Su presencia en el programa normaliza y trivializa su historial de declaraciones ofensivas y divisivas y no tiene cabida en el entretenimiento convencional”, continuó.
“ITV o cualquier canal de televisión respetable no debería permitir el lavado mediático de un agitador de extrema derecha que busca sacar provecho del odio”.
