Más de las tres cuartas partes de las personas LGBTQ+ en Australia han sufrido abuso o maltrato por parte de sus padres u otras figuras de autoridad, según reveló un impactante estudio.
El estudio, realizado por académicos de universidades del país, muestra que los australianos queer de la comunidad tienen tres veces más probabilidades de sufrir maltrato que sus homólogos masculinos heterosexuales. Se informó que el abuso fue causado principalmente por sus familias.
Las principales causas de dicho trato reportadas por personas queer y de género diverso entre 16 y 24 años fueron el abuso emocional y la exposición al abuso doméstico.
De aquellos en el mismo grupo de edad que se identificaron como de género diverso (incluidas las personas trans), el 90,5 por ciento informó haber sufrido maltrato.
Mientras tanto, el 77,5% de los participantes había experimentado múltiples formas de maltrato, incluido abuso emocional, físico o sexual, exposición a violencia doméstica o negligencia.
El estudio, dirigido por el profesor Daryl Higgins, director del Instituto de Estudios de Protección Infantil de la Universidad Católica Australiana, y en coautoría de académicos tanto de Australia como del extranjero, se basó en las conclusiones del Estudio Australiano sobre Maltrato Infantil (ACMS) del año pasado.
El estudio anterior se basó en encuestas a 8.500 personas, lo que lo convierte en la encuesta representativa más grande conocida sobre la sexualidad australiana. El censo de 2021 recopiló datos sobre sexo biológico, pero no sobre género u orientación sexual.
“Por primera vez, podemos ver una mayor probabilidad de que los australianos con identidades diversas hayan experimentado cualquiera de las cinco formas distintas de maltrato infantil y maltrato multitipo”, dijo Higgins.
“Esta importante asociación puede explicar algunas de las disparidades de salud, incluidos los problemas de salud mental, que se han encontrado en personas con diversidad de género y sexualidad”.
La directora general de Queerspace, un servicio de apoyo a la salud y el bienestar LGBTQ+, la Dra. Paula Fernández Arias, acogió con satisfacción el estudio, basándose en la correlación entre el maltrato infantil y el deterioro de la salud mental.
Fernández Arias también dijo que ese maltrato equivale a “discriminación” contra la comunidad LGBTQ+. “Esas experiencias provienen de formas sistémicas de discriminación muy arraigadas que se basan en paradigmas heteronormativos y heterosexistas”, afirmó.
“Es exactamente el mismo tipo de fuerza impulsora detrás de la violencia contra las mujeres. La idea es que en la cima de la pirámide hay hombres blancos cisgénero y sanos y que cualquier desviación de ese parámetro te pone en riesgo”.
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