Un juez de Tennessee ha dictaminado que los escritos del tirador de Covenant School, un individuo transgénero que disparó y mató a tres adultos y tres niños de nueve años en su ataque del 7 de marzo de 2023 a una escuela cristiana en Nashville, pueden permanecer privados porque son propiedad protegida por derechos de autor de las familias de las víctimas.
El año pasado, la familia de Aiden Hale, exalumno de la escuela, transfirió la propiedad de los numerosos escritos de Hale (entre ellos un manifiesto y 20 diarios) a las familias de las víctimas. Este novedoso enfoque contribuyó a mantener la privacidad del material.
Varias organizaciones, incluidos medios de comunicación, presentaron una demanda para hacer pública la antigua propiedad de Hale, pero la jueza del Tribunal de Cancillería I’Ashea Myles dictaminó recientemente que el reclamo de derechos de autor de las familias era válido.
Refiriéndose a la Ley de Registros Públicos de Tennessee (TPRA), Myles encontró que el acuerdo para registrar los derechos de autor de la obra fue único pero acordado con los padres de las víctimas, y encontró que “los escritos, diarios, arte, fotos y videos originales creados por Hale están sujetos a una excepción a la TPRA creada por la Ley Federal de Derechos de Autor”, informó Associated Press.
El fallo de la semana pasada se produjo más de un año después de la solicitud de registros públicos para liberar los materiales.
Las personas fallecidas en el tiroteo masivo fueron Evelyn Dieckhaus, Hallie Scruggs y William Kinney, todos de 9 años, y los adultos Cynthia Peak, de 61 años; Katherine Koonce, de 60 años; y Mike Hill, de 61 años.
Las familias de las víctimas elogiaron el fallo del juez Myles.
“El último año y medio sin Cindy ha sido difícil”, dijo la familia de Cindy Peak, una maestra sustituta en la escuela. “Pero hoy nos sentimos un poco aliviados. Negarle a la tiradora parte de la notoriedad que buscaba al publicar sus pensamientos viles y sin filtros sobre el mundo es un resultado por el que todos deberíamos estar agradecidos”.
El esfuerzo por mantener privada la propiedad de Hale no ha detenido las filtraciones de material, gran parte del cual fue documentado por la policía poco después de la masacre.
En extractos del manifiesto escrito por Hale, quien se identificó como hombre y usó los pronombres él/él, el tirador menospreció a la comunidad LGBTQ+ y asoció el “privilegio blanco” con el sesgo anti-gay.
“¡Maten a esos niños!”, escribió Hale. “Esos idiotas que van a escuelas privadas de lujo con esos elegantes pantalones caqui y mochilas deportivas con los Mustang y convertibles de sus papás. Que se jodan, pequeños hijos de p***. Deseo dispararles a ustedes, débiles hijos de p*** con su pelo amarillo como una melena. ¡Quiero matarlos a todos, pequeños hijos de p***! Montón de pequeños hijos de p*** con sus privilegios blancos. Que se jodan, hijos de p***”.
Otras dos páginas compartidas en línea por el podcaster de derecha Steve Crowder, un experto anti-LGBTQ+ acusado de abusar de su esposa y exponer los genitales a sus compañeros de trabajo, revelaron la agenda de Hale para el día previo al tiroteo, así como una página en la que Hale llamó al 27 de marzo “Día de la Muerte”. Hale escribió que se sentía “un poco nervioso, pero emocionado también” por matar gente.
Los derechistas han culpado cada vez más a los transgéneros “mentalmente enfermos” de los tiradores por los tiroteos públicos. Sin embargo, la gran mayoría de los tiradores en masa en Estados Unidos son hombres cisgénero. El enfoque de la derecha en los homosexuales que portan armas y en las “enfermedades mentales” de los tiradores es simplemente una forma de estigmatizar a las personas homosexuales y, al mismo tiempo, desviar la atención de las regulaciones de control de armas que podrían ayudar a detener los tiroteos masivos antes de que ocurran.
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